Recientemente, un grupo de miembros y amigos de nuestra sede en Xela emprendió un viaje a este mágico lugar para disfrutar de un atardecer único y participar en actividades rejuvenecedoras como senderismo yoga y meditación.
La joya de nuestra excursión fue, sin duda, el atardecer en Cuxliquel. Nos encontrábamos en un mirador estratégico que ofrece vistas panorámicas desde varios puntos. Un recordatorio de la belleza simple pero impactante que la naturaleza tiene para ofrecer.
Cuxliquel es mucho más que un simple destino turístico. Esta aventura fue un retiro de renovación para el cuerpo y la mente, y reforzar la convivencia y amistad, proximamente más destinos por descubrir.